sábado, 13 de abril de 2024

Salida 13 abril. Vuelta al Adarra

 



Este sábado toca Guipúzcoa. He mirado las previsiones del tiempo y, milagrosamente, no va a llover. Es importante también que en los días anteriores tampoco llueva, como así parece, porque esta excursión tiene un tramo que se embarra con mucha facilidad. Así que, parece que podremos hacerla.
El interés de esta excursión radica no sólo en el propio paseo sino también en los numerosos y bien conservados restos megalíticos que podremos observar a lo largo de todo el camino.
Quedaremos en el caserío Besabi, que es también un bar-restaurante. Allí os espero.
Quisiera hacer unas precisiones sobre el recorrido.

En la parte inicial se habla de visitar una cueva prehistórica sepulcral, pero yo creo que deberíamos dejarla para el final, lo digo por no entretenernos demasiado desde el principio.

El itinerario no pasa por la cima del Adarra, pero quien quiera puede subir porque no hay mucha distancia desde el recorrido hasta la cumbre.

En la parte final se indica que hay que subir una cumbre más. Es totalmente innecesario para quien no desee esforzarse más ya que se puede tomar una pequeña parte del recorrido de ida para finalizar la excursión. Sí es cierto que desde su cima se contempla una panorámica muy bella y que hay algún resto megalítico más, pero la bajada es muy empinada y poco recomendable para los que sufren de sus rodillas.

Si se desea comer en el mismo Besabi, punto de partida, es necesario reservar ya que suele estar muy concurrido.

Por mi parte nada más. Si necesitáis precisiones, os responderé con gusto.
Un saludo.


Punto de encuentro:  Aparcamiento piscinas de Nuevo Artica en variante norte.

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El aparcamiento en Besabi o Besadegi (300 m) nos ha reunido a 23 miembros. Un buen grupo hemos hecho caso omiso de la recomendación de dejar para la vuelta la visita a la cueva; ésta situada en un recinto privado, ocupado por unas vacas betizus que no tenían aspecto amistoso. Como exhibían dos razones muy convincentes, hemos desistido; la visita a Marizulo, queda para otra ocasión. Nos hemos dirigido a la casa rural Montefrio (353 m) donde un poste con la indicación de "Adarramendi" nos señala la dirección correcta.

El camino de ascenso resulta algo incómodo por tramos de piedras, profusión de raíces y zonas algo húmedas. Llegamos a la erreka Sorotxota (440 m), hayas trasmochadas que fueron material para carboneras. Bello el paraje de Belabieta, erreka del mismo nombre (500 m); afrontamos un corto repecho. Desde el llano de Belabieta (548 m) y desde cualquier punto se ven las dos cimas rocosas del Adarra, que da nombre a la salida. Un reducido grupo ha buscado caminos menos exigentes.

Hacia el NE se dejan ver las Peñas de Aballarri, que no nos han seducido. En cualquier caso, hemos de continuar hacia el llano de Eteneta. Pasamos por la fuente Agirreaizpe (660 m). Tras el llano llegamos al collado (700 m) donde se encuentran el cromlech y menhir de Eteneta . Es el punto más alejado de la circular. Si continuáramos por el cordal llegaríamos, salvando las distancias, hasta el Mandoegi, que un buen grupo lo subimos en cierta ocasión desde Goizueta; eran otros tiempos.

Algunos se dirigen hacia la loma de Tximista (782 m), y otros decidimos subir derechos al Adarra ( 819 m ) Buenas vistas hacia los cuatro puntos cardinales: la costa, Donostia en todo su esplendor. En otra dirección Aralar, Aizkorri; Erlo y Ernio, Peñas de Aia, Larun, Mendaur, Adi… breve descanso, agrupamiento y descenso hasta el paraje Elurzulo (neveros) y un gran cromlech, donde almorzamos a la sombra. Desde el collado Mantale (579 m), situado entre el Adarra y las Peñas de Aballarri (635 m.) Pasamos muy cerca de Mantale harkaitza.

Se ve junto al camino un gran bloque de piedra denominado Sansonarri (561 m); la leyenda cuenta que el mismo Sansón la lanzó con su honda contra los gentiles que bailaban en el pueblo de Arano, pero resbaló, y la piedra sólo llegó hasta medio camino.

Más monumentos megalíticos, más peñas, las de Arlegor, queda un descenso bastante empinado, y una prolongación hasta la necrópolis MULISKO GAINA, verdaderamente llamativo. El pico de ONDDI lo han superado sólo los más esforzados. Según su relato, subida fácil y descenso sobre sendero de hierba sin complicaciones. Estos habrán rebasado ampliamente los 13 km y desnivel de 750 m. Regreso escalonado a BESABI Jatetxea, establecimiento que ha atendido a los demandantes habituales de cañas, pinchos y fritos.

Félix

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